Entendiendo así la salud, LA INTERDISCIPLINA POR LA QUE BREGAMOS implica reconocer la historicidad y por lo tanto la relatividad de la construcción de los saberes disciplinarios,  anteponiendo la comprensión de la SALUD en su COMPLEJIDAD E INTEGRALIDAD.

La Interdisciplina forma así una metodología de trabajo y un marco conceptual con bases epistemológicas, donde debemos abandonar la ilusión de poder explicar el todo a partir de las partes, y desde los discursos parciales de cada ciencia. La interdisciplinariedad es un “posicionamiento, no una teoría unívoca. Ese posicionamiento obliga básicamente a reconocer la incompletud de las herramientas de cada disciplina” (Stolkiner, 2015: 2).

Al respecto, De Sousa Campos nos dice: Trabajamos con problemáticas complejas cuya dimensión exigiría una flexibilidad doctrinaria y operativa a la que no estamos habituados, un grado de democracia, de distribución de poder de CONFIANZA en el otro, ausentes en la sociedad actual y es evidente que la máquina estatal tiene que estar al servicio del público (De Sousa Campos en Arnaudo y otros, 2012: s/p).

Estamos convencidos que las prácticas en Salud deben propender a la subjetivación haciendo lugar a la SINGULARIDAD y es desde aquí que podemos empezar a hablar de un paradigma de derechos: El derecho de acceso a la salud de cada individuo para quien su ESTADO DE SALUD puede ser pensado diferente al de otros.

En términos de Jean Piaget, nada nos compele a dividir lo real en compartimentos estancos, o en pisos simplemente superpuestos que corresponden a las fronteras aparentes de nuestras disciplinas científicas y, por el contrario, todo nos obliga a comprometemos en la búsqueda de instancias y mecanismos comunes (Piaget en Elichiry, 2009)

  La orientación interdisciplinaria surge de una concepción constructivista de la realidad, siendo ésta considerada como una totalidad estructurada, pero, a la vez, estructurante. Desde esta visión, la interdisciplina reconoce que la realidad no es algo obvio, unívoco y simple que se puede comprender fácilmente, sino que es contradictoria. En este sentido, la interdisciplina se basa en la complejidad y en la unidad de la realidad, por un lado, y en la división del trabajo científico necesario para la evolución de la ciencia, por otro.